Había una vez un pozo mágico ubicado en las Cataratas
del Niágara, un día Bel y su familia, fueron a las cataratas de paseo, de
pronto su perra Concheta empezó a ladrar porque el pozo tenia magia y vida; y
la perra empezó a rastrearlo.
Decidió seguirla hasta llegar al pozo, no sabía
que éste, era de deseos y cuando toco el pozo cobró vida y le dijo a Bel: - Lanza
una moneda y yo te concederé tres deseos.
Lanzó la moneda pero lo que Bel no sabía, era
que si abusaba del poder, el pozo le quitaba los deseos y desaparecía. Ella
abusó de ese poder.
Su primer deseo fue tener la ropa más bonita, el
segundo fue tener los zapatos más lindos y el tercero fue tener los accesorios
más lujosos, sólo para presumir con sus amigas.
Al día siguiente fue a lanzarle otra moneda al
pozo de deseos y cuando Bel la lanzó, el pozo se la denegó, diciéndole: - ¡Abusaste
del poder, eres una vanidosa, esos deseos no son más que para ti, y por consecuencia,
te quitaré todo lo que pediste!
El pozo desapareció y Bel ya no tenía nada de lo
que había deseado, y lo sucedido le dejó una enseñanza: Que no hay que ser
ambicioso y vanidoso en la vida y que si los deseos no son desde el corazón
para bien, solo son unos sueños.
Fin.
Autor:
Paola Timaure 5to. A
U. E. Instituto
"Madre María" / Año Escolar 2016-2017
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